Desde PDF 1.6 -Adobe Acrobat 7- en adelante, es posible incrustar fuentes OpenType, y ya no deberán ser PostScript o TrueType.
Adobe y Microsoft continuaron ampliando y refinando el formato OpenType a lo largo de la siguiente década, hasta que en 2005 se inició el proceso para oficializarlo como un estándar abierto de la International Organization for Standardization (ISO), bajo los auspicios del grupo MPEG, que ya antes había adoptado el OpenType por referencia. El nuevo estándar consiste básicamente en la versión 1.4 de la especificación de OpenType, con adaptaciones lingüísticas requeridas por la ISO, y se denomina Open Font Format. La norma fue adoptada oficialmente a partir de marzo de 2007 y declarada como estándar ISO/IEC 14496-22, mismo que está disponible de manera pública y gratuita. Esto indica claramente que OpenType es el formato para las fuentes del futuro. Alrededor de 2007, se estimaba que entre el 85% a 90% de todos las tipografías disponibles en el mercado -hasta hoy- son las fuentes OpenType, la mayoría de los diseñadores y fundidores tipográficos usan actualmente OpenType como su norma.
Para el año de 2009, Web Open Font Format -WOFF- fue diseñado a pedido y luego logró su normalización o estandarización para uso web en 2010 a través de la W3C, en breve la mayoría de los navegadores de la InterNet les habrá adoptado y gestionará ampliamente.
Actualización. Hay una increíble colección de fuentes tipográficas digitales disponibles en línea tanto para diseñadores gráficos como para bloggers, Google Fonts. Observa de una guía paso a paso para Dominar Google Fonts. Seguramente ya conoces Google Fonts como "ese sitio genial con tipografías gratis". Y tienes razón, pero eso es solo la punta del iceberg. Pensar así es como decir que la cocina de un chef profesional es solo "un lugar con ingredientes gratis". Google Fonts es una de las herramientas más potentes y estratégicas que tendrás en tu carrera. Si aprendes a usarla bien desde ahora, tendrás una ventaja enorme. Olvídate de solo buscar una fuente "bonita"; vamos a aprender a construir sistemas tipográficos sólidos. Sigue estos pasos y pasarás de ser un simple usuario a un diseñador que sabe lo que hace.
Cambia tu mentalidad (La regla de oro). Deja de buscar "fuentes sueltas" y empieza a pensar en "sistemas tipográficos". Un sistema tipográfico es simplemente el conjunto de reglas que usarás en tu diseño: una tipografía para los títulos grandes (H1), quizás otra para el texto normal (párrafos), y definir qué pesos (grosor) usarás para cada cosa. ¿Por qué es importante? Porque la coherencia es la base del buen diseño. Un sistema claro hace que tus diseños se vean profesionales, ordenados y fáciles de leer. Entrar a Google Fonts sin un plan es como ir al supermercado con hambre y sin lista: acabarás con un montón de cosas que no combinan.
Descubre tu nuevo superpoder: Las fuentes variables. Prioriza y experimenta con las Fuentes Variables. Imagina que en lugar de tener solo los botones "Light", "Regular" y "Bold", tuvieras una perilla de volumen que te permite ajustar el grosor de la letra a cualquier nivel exacto que quieras. ¡Eso es una fuente variable! ¿Cómo encontrarlas? En la barra de búsqueda de Google Fonts, simplemente marca la casilla "Show only variable fonts". ¿Por qué son geniales para ti?
Creatividad casi infinita, tú puedes crear jerarquías visuales perfectas. ¿El título necesita ser un poquito más grueso que Bold? ¡Puedes hacerlo!
En el futuro, cuando diseñes sitios web, cargar una sola fuente variable es mucho más rápido que cargar 5 o 6 archivos de fuentes diferentes. Tus sitios cargarán más rápido y tus clientes (y profesores) te amarán por ello.
Entra, activa el filtro y juega con los "sliders" (deslizadores) de una fuente variable como Inter o Roboto Flex. Verás la magia al instante.
Sé un Diseñador Eficiente (Piensa en la Velocidad). Carga solo los estilos que realmente necesitas. Cuando eliges una tipografía, Google Fonts te muestra un panel a la derecha llamado "Selected family". Por defecto, podría añadir muchos estilos (Thin, Light, Regular, Medium, Bold, Black, etc.). Piensa en esto como hacer la maleta para un viaje: no metes todo tu armario "por si acaso", solo lo que sabes que vas a usar. Cada estilo de fuente que añades a un proyecto web lo vuelve un poco más lento. ¡Eureka! Cuando hayas elegido tu fuente, ve al panel de la derecha y elimina todos los estilos que no vayas a usar en tu diseño. Si solo necesitas un estilo normal para párrafos y uno en negrita para subtítulos, selecciona únicamente "Regular 400" y "Bold 700". ¡Y ya está!
El arte de saber combinar (El "Pairing"). Crea combinaciones que tengan contraste y armonía. Una de las tareas más comunes es elegir una fuente para títulos y otra para el cuerpo de texto. Google Fonts te da sugerencias en la pestaña "Pairing", pero tú puedes hacerlo como un profesional.
Ordenar la jerarquía del texto. La receta más fácil y efectiva para empezar: Para los Títulos: Usa una fuente Serif (las que tienen "remates" o "patitas", como Playfair Display o Merriweather). Suelen ser más elegantes y decorativas. Para el Texto de Párrafo: Usa una fuente Sans Serif (las que son "de palo seco", sin remates, como Lato, Roboto o Open Sans). Son más limpias y fáciles de leer en bloques largos. ¿Por qué funciona? Porque el contraste entre las dos resulta ser muy evidente. Tu cerebro distingue al instante qué es un título y qué es texto, haciendo la lectura mucho más fácil.
Explora la caja de herramientas completa. Aprovecha los iconos y el conocimiento que te regala Google. Google Fonts es más que letras. Hay dos secciones que debes conocer: Icons: Una librería gigante de iconos de alta calidad que puedes usar en tus diseños. Lo mejor es que combinan perfectamente con las fuentes y también pueden ser variables, ¡así que puedes ajustar su grosor para que encajen a la perfección! Knowledge: Piensa en esto como una serie de mini-clases magistrales gratuitas sobre tipografías. Hay artículos escritos por los mejores diseñadores del mundo. Leer uno a la semana te pondrá muy por delante y actualizado.
La magia de la licencia (tu pase libre para crear). Diseña con total tranquilidad.
Casi todas las fuentes en Google Fonts usan una licencia llamada SIL Open Font License. ¿Qué significa esto en palabras sencillas? Que puedes usar CUALQUIER fuente para CUALQUIER proyecto (trabajos de la universidad, tu portafolio, proyectos para clientes que te paguen, etc.) sin pedir permiso y sin pagar un céntimo. Es la tranquilidad de saber que nunca tendrás un problema legal por usar una tipografía.
La SIL Open Font License (OFL) es una licencia de código abierto y gratuita diseñada específicamente para tipografías, siendo la que respalda a la gran mayoría de las fuentes de Google Fonts. Su objetivo principal es permitir que diseñadores y desarrolladores usen, modifiquen y compartan fuentes libremente, fomentando la colaboración y la creatividad. En la práctica, esto te garantiza el derecho de utilizar las fuentes en cualquier tipo de proyecto, ya sea personal o comercial (como logotipos, sitios web o productos para la venta), sin tener que pagar royalties ni preocuparte por complejos asuntos legales. Esta libertad casi total viene acompañada de tres condiciones clave muy razonables. Primero, no puedes vender el archivo de la fuente por sí solo, aunque sí puedes vender productos que la utilicen. Segundo, si modificas una fuente, estás obligado a darle un nuevo nombre para no crear confusión con la versión original y proteger así el trabajo del autor. Y tercero, si redistribuyes la fuente (original o modificada), siempre debes incluir el archivo de texto de la licencia para que otros conozcan sus derechos y responsabilidades. Estas reglas aseguran un ecosistema tipográfico justo y colaborativo.
Ahora hagamos un breve repaso. Piensa en Sistemas, no elijas fuentes al azar. Planifica tu jerarquía. Usa Fuentes Variables, son el presente y el futuro. Aprovéchalas. Sé Eficiente, carga solo los pesos que necesitas. Combina con Intención, busca el contraste (Serif + Sans Serif es un gran comienzo). Explora todo, no te olvides de los iconos y de aprender en la sección "Knowledge". Si sigues estos pasos, no solo harás mejores diseños, sino que empezarás a pensar como un diseñador profesional desde el inicio.
Espero que te sea de mucha utilidad esta corta línea de tiempo, y que tu valoración de las tipografías digitales esté más clara. Siempre agradezco tus comentarios sobre lo que comparto desde Pensamientos Maupinianos.